Un estudio de UNICEF revela que uno de cada cuatro niños en el mundo enfrenta una grave escasez de alimentos, lo que significa que solo tienen acceso a dos de los ocho alimentos esenciales para una dieta saludable cada día. Esto afecta a aproximadamente 181 millones de niños menores de 5 años, aumentando significativamente su riesgo de padecer malnutrición, incluida la emaciación, que amenaza sus vidas.

El informe examina la situación de la privación alimentaria en casi 100 países, destacando que millones de niños no pueden obtener o consumir alimentos nutritivos necesarios para su crecimiento y desarrollo óptimos. La mayoría de estos niños dependen únicamente de la leche materna o algún alimento básico con almidón, como arroz o maíz, con una baja ingesta de frutas, verduras y alimentos ricos en nutrientes como huevos o carne.

Catherine Russell, Directora Ejecutiva de UNICEF, advierte que la situación de pobreza alimentaria grave coloca a estos niños al borde de la supervivencia y afecta irreversiblemente su crecimiento y desarrollo cerebral. La pandemia de COVID-19, junto con desigualdades crecientes, conflictos y crisis climáticas, ha elevado los precios de los alimentos y el costo de la vida, empeorando aún más la situación.

El informe destaca que la mayoría de los niños afectados por la pobreza alimentaria grave residen en 20 países, principalmente en el sur de Asia y África subsahariana. En América Latina y el Caribe, aproximadamente el 9% de los niños enfrenta pobreza alimentaria severa, mientras que el 28% experimenta pobreza moderada. Esta situación es especialmente grave en lugares como Somalia y la Franja de Gaza, donde el conflicto y las restricciones han exacerbado la escasez de alimentos y la incapacidad de las familias para satisfacer las necesidades alimentarias de los niños.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí