El papa Francisco hizo un llamado a los Estados para que «aseguren condiciones humanas a los refugiados y faciliten los procesos de integración», durante la audiencia general en la plaza de San Pedro. Este mensaje llega en vísperas del Día Mundial del Refugiado, una fecha promovida por las Naciones Unidas, que se celebra este jueves.
Francisco aprovechó la ocasión para instar a la comunidad internacional a prestar especial atención a quienes se ven forzados a abandonar sus hogares en busca de paz y seguridad. Subrayó la importancia de recibir, promover, acompañar e integrar a los refugiados, quienes, según él, tocan a las puertas de todos nosotros.
El pontífice también elevó una oración, pidiendo que los Estados se esfuercen por proporcionar condiciones dignas a los refugiados y por facilitar su integración en las sociedades que los acogen. Este llamado busca despertar una respuesta humana y solidaria hacia aquellos que sufren debido a conflictos y persecuciones.
Según el último informe de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), el número de personas refugiadas y otras que necesitan protección internacional ha alcanzado los 43,4 millones, destacando la magnitud del desafío global que enfrentamos.