En las primeras horas de la madrugada, una niña se extravió en la esquina de la calle San Martín y la avenida Orellana, quedando expuesta a múltiples peligros. Mientras sus familiares la buscaban desesperadamente, el miedo y la angustia se apoderaban de ellos ante la posibilidad de que la niña sufriera algún daño.
Las cámaras de seguridad del área capturaron los momentos de angustia de la pequeña, quien vagaba sola y asustada. La situación se tornaba cada vez más crítica, con el temor de que pudiera encontrarse con alguien peligroso. Sin embargo, en medio de la adversidad, una madre providencial apareció, como enviada por el destino, para consolar y proteger a la niña.
La bondadosa mujer se acercó a la menor, la calmó y la llevó a un lugar seguro mientras se contactaban a los padres. Gracias a su intervención oportuna, la niña fue conducida a la comisaría, donde fue entregada sana y salva a sus familiares, poniendo fin a la angustiante búsqueda.
Este incidente nos recuerda la importancia de cuidar a nuestros hijos y mantenerlos siempre a salvo. Agradecemos a la madre que, con su noble acto, evitó una posible tragedia.