Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, aseguró su continuidad en el cargo tras obtener la confianza del Parlamento Europeo el jueves pasado. Recibió el respaldo de 401 eurodiputados, superando los 360 votos necesarios para su confirmación. Hubo 284 votos en contra, 15 abstenciones y siete votos nulos, con la ausencia de Toni Comín de Junts condicionando la mayoría.
Von der Leyen estuvo presente en el hemiciclo y fue felicitada efusivamente por aliados y oponentes políticos tras la votación secreta. Aunque el voto fue secreto y no hubo disciplina de partido, los principales grupos políticos, como populares, socialdemócratas, liberales y verdes, habían instruido a sus miembros a votar a favor.
En contraste, los partidos de los extremos ideológicos, como los Patriotas por Europa, la Izquierda y la Europa de las Naciones Soberanas, votaron en contra. Los Conservadores y Reformistas permitieron libertad de voto, aunque esperaban que una mayoría de sus eurodiputados votara en contra.
Ahora, Ursula von der Leyen tiene el verano para formar su equipo de comisarios y asignar las carteras respectivas, un proceso que se espera concluya en septiembre con la presentación de su selección.
