El discurso de la presidenta Dina Boluarte ante el Congreso de la República, en ocasión del aniversario patrio, será recordado más por las imágenes de un hemiciclo vacío y asistentes visiblemente aburridos, algunos incluso dormidos, que por su contenido. La presidenta tardó cinco horas y un minuto en leer su extenso mensaje, el más largo en los últimos veinte años para un jefe de Estado en esta fecha.
Más allá de estos aspectos anecdóticos, poco se puede rescatar del mensaje de la mandataria. Boluarte comenzó su alocución culpando a su predecesor Pedro Castillo de la crisis actual, a pesar de haber pasado más de 17 meses desde que asumió el cargo. También omitió mencionar que su mandato no es producto de una elección directa, sino de una sucesión, y que ella misma fue vicepresidenta y ministra en el gobierno de Castillo.
Durante su discurso, bajo la atenta mirada de su cuestionado hermano Nicanor, Boluarte se enfocó en la necesidad de un mayor crecimiento, bienestar y seguridad en el país. A diferencia de su mensaje anterior, esta vez resaltó la importancia de la inversión privada, destacando las oportunidades en diversos sectores y la estabilidad jurídica que Perú ofrece a los inversionistas. Anunció la adjudicación de contratos para el ferrocarril Huancayo-Huancavelica y proyectos eléctricos, y mencionó planes para un nuevo aeropuerto en Huancavelica.
En su compromiso con una minería competitiva y sostenible, Boluarte afirmó que el proyecto minero Tía María es una realidad, aunque no detalló cómo se abordará la oposición en Arequipa. También mencionó que un grupo de trabajo multisectorial está actualizando la estrategia nacional contra la minería ilegal.
En cuanto a la lucha contra la delincuencia y la corrupción, Boluarte anunció la modernización del Ministerio del Interior, proponiendo su cambio de nombre a Ministerio de Seguridad Pública. Sin embargo, la mandataria fue criticada por solo dedicar cuatro párrafos de su discurso al tema de la corrupción, un tema que preocupa al 49% de la población según una encuesta de Ipsos. También se comprometió a construir nuevas escuelas policiales y fortalecer las labores de inteligencia contra el crimen organizado.