El presidente de Chile, Gabriel Boric, expresó este sábado, tras reunirse en La Moneda con su embajador en Venezuela, Jaime Gazmuri, recientemente expulsado por el gobierno venezolano, que Chile mantiene su postura de no reconocer el proclamado triunfo de Nicolás Maduro. Boric destacó en su cuenta de la red social X que no validarán ningún resultado que no sea verificado por organismos internacionales independientes.
El mandatario chileno también hizo un llamado a respetar plenamente los derechos humanos de los manifestantes en Venezuela y a poner fin a las detenciones arbitrarias y la violencia. Boric calificó la expulsión de la misión diplomática chilena de Venezuela como «intempestiva e injustificada».
El canciller chileno, Alberto van Klaveren, manifestó su respeto por Edmundo González Urrutia, reconociendo la posibilidad de que haya ganado las elecciones, pero subrayó que no pueden afirmarlo con certeza debido a la falta de verificación del proceso electoral. Además de Chile, Venezuela ordenó el retiro de sus embajadores en varios países de la región, incluyendo Argentina, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay, y expulsó a sus misiones diplomáticas.
Con el cierre de la Embajada de Venezuela en Santiago y la suspensión indefinida de todos sus trámites consulares, decenas de ciudadanos venezolanos se han congregado frente al edificio para obtener información sobre su situación migratoria y otros asuntos. El presidente Boric fue uno de los primeros líderes internacionales en exigir transparencia en el recuento de votos y en cuestionar los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral venezolano, que declaró a Nicolás Maduro ganador con el 51,2 % de los votos. La oposición ha denunciado irregularidades y ha exigido la publicación de todas las actas, apoyo que también han recibido de varios países de la región, la ONU y el Centro Carter.