El presidente del Parlamento venezolano, Jorge Rodríguez, calificó duramente a un grupo de expertos de la ONU, llamándolos «basura», y propuso que se prohíba la observación internacional en futuras elecciones en Venezuela. Esta reacción se dio tras un informe preliminar del panel de la ONU que criticó al Consejo Nacional Electoral (CNE) por no cumplir con las normas básicas de transparencia en las elecciones presidenciales del 28 de julio, donde Nicolás Maduro fue declarado ganador.
El informe de los observadores de la ONU señaló que el CNE no respetó los plazos establecidos y que las medidas esenciales para garantizar la credibilidad del proceso electoral fueron ignoradas. A pesar de la proclamación de Maduro como vencedor con un 52% de los votos, la oposición, encabezada por María Corina Machado, ha acusado al gobierno de fraude y reclama la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia.
En respuesta al informe, la cancillería venezolana rechazó categóricamente las acusaciones, calificándolas de mentirosas y dañinas para la confianza en los mecanismos internacionales de cooperación. Rodríguez, durante una sesión de la Asamblea Nacional, controlada por el partido gobernante, expresó su descontento con los expertos de la ONU y sugirió una reforma electoral que impida la participación de observadores extranjeros en los comicios del país.
Las protestas por parte de la oposición, que rechazan los resultados y denuncian un intento de «golpe de Estado» por parte de Maduro, han dejado un saldo de 25 muertos, 192 heridos y más de 2.400 detenidos. Mientras tanto, Estados Unidos, Europa y varios países de América Latina han exigido al CNE que publique los resultados detallados de las elecciones.